En el mundo del fitness, se ha cuestionado si el café, con su cafeína, afecta negativamente la síntesis proteica y la masa muscular. Sin embargo, investigaciones recientes sugieren un panorama diferente. Descubre cómo el café, impulsado por compuestos como el ácido clorogénico, no solo no perjudica, sino que podría potenciar la hipertrofia muscular. Un viaje fascinante más allá de la cafeína.
Café y masa muscular: el café es mucho más que cafeína…
Se comenta por ahí que el café, debido a la cafeína, puede inhibir la señalización muscular de mTOR (principal regulador de la síntesis proteica) y que, por tanto, puede perjudicar la ganancia de masa muscular. Sin embargo, esto último no es cierto. Pero es que, además, casi podríamos concretar lo contrario. Es decir, que el café podría ayudar a la hipertrofia muscular, porque el café es mucho más que cafeína…
El efecto del café en el músculo
El efecto del café en el músculo no ha sido bien estudiado, pero bueno, algo hay. Aunque la mayoría de estudios son en ratones, nos puede dar una idea o al menos la intriga de seguir investigando.
Un estudio reciente mostró que la ingesta de café previene la progresión de la sarcopenia en ratones ancianos. Estudios previos han demostrado que el café acelera la regeneración del músculo esquelético en ratones lesionados y aumenta la proliferación de células satélite en el músculo esquelético
Además, el café mejora la diferenciación miogénica mediante la regulación al alza de la miogenina. También comprobaron que el café inhibía la miostatina, que como ya sabemos es el principal represor del crecimiento muscular.
Además, interesantemente, encontraron que el café disminuye la activación de AMPK en el músculo y activa mTOR, es decir, todo lo contrario a lo que hace si tomamos sólo cafeína de forma aislada. Esto sugiere que el efecto del café en el músculo no se debe a la cafeína, sino a otros compuestos, y es por ello que digo que el café es mucho más que cafeína, ya que es rico en ciertos polifenoles como el ácido clorogénico o el ácido cafeico, que parecen ser los principales mediadores de estos efectos positivos en el músculo esquelético.
En resumen, el café, lejos de ser un obstáculo para el desarrollo muscular, emerge como un aliado valioso. Más allá de la cafeína, sus ricos polifenoles, como el ácido clorogénico, desempeñan un papel crucial al activar mTOR, inhibir la miostatina y mejorar la regeneración muscular. Aunque los estudios se centran en ratones, sugieren un potencial prometedor para la prevención de la sarcopenia y el estímulo de la hipertrofia. El café revela su verdadera naturaleza: un elixir multifacético que va más allá de la energía, abriendo nuevas perspectivas para maximizar los beneficios musculares.