La nutrición es la parte más importante del “entrenamiento invisible”
Sabemos de sobra que para optimizar las cualidades físicas de cualquier deportista, la nutrición, en primer lugar, y la suplementación deportiva, en segundo lugar (en mucha menor medida que la nutrición en si misma) son fundamentales para la mejora del rendimiento, la mejora de la composición corporal, la recuperación y la prevención de lesiones de los deportistas a cualquier nivel. Por supuesto de base está la mejora de la salud general obviamente.
Uno de los problemas reside en que la nutrición, al contrario que el entrenamiento, es una constante que se debe realizar varias veces al día durante los 7 días de la semana. Esto unido a que la nutrición de manera aguda no da signos de su acción fisiológica, como lo hace el entrenamiento (fatiga, sensación de esfuerzo, congestión muscular, etc.), hace que a veces se le otorgue menos importancia a la nutrición.
En las siguientes gráficas muestro los datos reales de la mejora de la fuerza y salto del futbolista Carles Gil desde 2020 a 2021. Carles comenzó conmigo el año pasado (2020), y tanto él como su preparador físico Josito Castro (el cual hace un excelente trabajo), reportan la gran mejora física que el jugador ha experimentado este año. Hace unos días precisamente anunciaba en mis redes que ha sido elegido mejor jugador de la liga de fútbol de EEUU.
Las coincidencias y la suerte no existen. El trabajo duro, la concienciación y la disciplina si. Con todo esto quiero decir, que la nutrición deportiva va mucho más de lo que se piensa normalmente. No se trata de comer sano, no se trata de que el/la deportista se vea los abdominales, no se trata de añadir suplementación por añadir. Se trata de optimizar todos los procesos fisiológicos y adaptaciones para conseguir la mejor versión de el/la deportista en todos los sentidos (fuerza, resistencia, potencia, composición corporal, salud, recuperación, etc.).