Las concentraciones de metales pesados, como el cadmio, el plomo y, sobre todo, el mercurio en pescados de consumo humano, supone un quebradero de cabeza para las instituciones sanitarias. Uno de los pescados con más contenido en mercurio es el atún.
Los enlatados son una solución fácil y rápida a la hora de preparar o condimentar cualquier plato. El consumo de atún enlatado es quizás el más frecuente. Por tanto, es inevitable hacerse la pregunta de si el atún enlatado mantiene las altas concentraciones de mercurio que este pescado contiene de forma natural.
Respecto al mercurio, la cantidad por lata de tamaño convencional (52 gramos), es de aproximadamente 15 microgramos.
Por tanto, para una persona de 70 kg de peso, que presenta una ingesta semanal tolerable de mercurio de unos 91 microgramos, podría comer unas 6-7 latas de atún a la semana sin problema. Esto sería si solo comiera atún en lata como única fuente de pescado. Pero aquí se obvian varias cosas. De hecho, los adultos sanos (salvo niños y mujeres embarazadas) probablemente podamos consumir más de 6-7 latas sin que represente ningún problema en relación al mercurio (siempre y cuando no se ingiera otro alimento aparte que sea fuente de mercurio) ¿Sabéis el por qué? A este tema en concreto le dedico parte de un capítulo en mi próximo libro 😉