En este artículo exploraremos el mundo de los carbohidratos, simplificaremos su clasificación en simples (como la glucosa o sacarosa) y complejos (como el almidón de la patata o el arroz). Descubre por qué los “lentos” son clave en una dieta para perder grasa, pero también aprende a abrazar la flexibilidad alimentaria. Desmitificaremos la desinformación sobre los carbohidratos simples, desentrañando secretos para una alimentación equilibrada. ¡Acompáñanos en este viaje nutricional express!
Clasificaciones de los carbohidratos
Existen diferentes clasificaciones de los carbohidratos. Sin embargo, para simplificar me remitiré a la más práctica:
- Carbohidratos simples
- Carbohidratos complejos
Los carbohidratos simples
Son aquellos carbohidratos formados por una sola molécula. Por ejemplo, la glucosa, la fructosa o la galactosa. También consideramos carbohidratos simples a aquellos formados por la unión de dos moléculas, como el azúcar blanco de mesa (sacarosa), que está constituido por la unión de una molécula de glucosa y otra de fructosa.
Alimentos con carbohidratos simples
Dentro de los carbohidratos simples podemos incluir alimentos como:
- Azúcar blanco
- Miel
- Mermeladas
- Dátiles
- Frutas
Los carbohidratos complejos
Son aquellos carbohidratos compuestos por oligosacáridos y polisacáridos. Los oligosacáridos son aquellos carbohidratos que están formados por de tres a veinte moléculas. Los polisacáridos están integrados por más de quince moléculas. Ejemplos de estos últimos son el almidón o el glucógeno.
En la siguiente imagen lo veréis más claro.
Alimentos con carbohidratos complejos
Dentro de los carbohidratos complejos podemos incluir alimentos como:
- Patata
- Arroz
- Cereales
- Legumbres
- Pan
- Boniato
Aunque dentro de una dieta saludable para perder grasa deben predominar los alimentos ricos en carbohidratos complejos, también denominados “lentos”, esto no significa que debamos eliminar drásticamente otros tipos de carbohidratos. A estas alturas ya sabéis que el exceso de rigidez no es nuestro aliado, sino la flexibilidad.
Además, existe mucha desinformación respecto a cómo impactan los carbohidratos simples en nuestra salud y en nuestro peso corporal. (En mi libro “Quema tu Dieta”, en el capítulo 9, dedico varios apartados donde aclaro dudas frecuentes sobre este tema).
Espero que esta breve inmersión en el universo de los carbohidratos te haya parecido interesante. Ahora, armados con conocimientos frescos, ¡a disfrutar de una alimentación equilibrada y flexible!