Un gran problema de la divulgación en nutrición de hoy en día es el nutricionismo, es decir, hablar de nutrientes aislados y no de ingesta de alimentos enteros en base a su impacto en la salud.
Ejemplo de esto es la leche, que se le suele atribuir un efecto pro-inflamatorio. Sin embargo, cuando acudimos a evidencia científica, los estudios en humanos, incluso meta-analizados, muestran claramente que su efecto es neutro o incluso ligeramente antiinflamatorio, ¡todo lo contrario! (Ulven et al 2019; Moosavian et al 2020)
¿Pero por qué se piensa que la leche es inflamatoria?
Por lo que acabo de decir, por el nutricionismo. Los argumentos para decir que la leche es inflamatoria vienen de estudios aislados donde se analiza la caseína, concretamente la beta-caseína A1 (una fracción proteica de la leche) y sus efectos infamatorios o intestinales. Algunos estudios que analizan este compuesto de manera aislada describen cierta actividad inflamatoria y alteraciones intestinales.
Pero la leche es mucho más que caseína, de hecho, la otra fracción proteica, el suero, ejerce acciones totalmente contrarias, siendo antiinflamatoria y mejorando la salud metabólica. Es por ello que cuando ingerimos leche, al ingerir el alimento íntegro, no se observan efectos negativos a nivel inflamatorio (salvo personas intolerantes a la leche obviamente).
Además, a nivel de patologías intestinales, es común que se retiren los lácteos de manera indiscriminada. En este estudio, se vio que retirar los lácteos en personas con colitisulcerosa o #Crohn causó una recaída del 36% de los pacientes a los 6 meses versus una recaída del 29% del grupo control. Tiene sentido, ya que como muestra Benmoussa et al 2019, los exosomas derivados de la leche pueden disminuir la inflamación en sujetos con enfermedades inflamatorias intestinales.
Interesante es este reciente estudio en ratas (Yasuhisa et al 2021) donde se ve que la leche puede prevenir la inflamación neural y alivia el deterioro cognitivo y la demencia relacionado con el envejecimiento.
Cada persona es un mundo y la opción de retirar lácteos debe ser individualizada, pero por favor, dejen de confundir distensión abdominal con inflamación.