El ejercicio es medicina. A día de hoy no existe ningún fármaco con tantos potenciales efectos en la prevención y tratamiento de patologías como el ejercicio.
El ejercicio es la auténtica “polipíldora” que previene y mejora la mayoría de enfermedades no transmisibles típicas del siglo XXI, tanto metabólicas, como neurológicas, psiquiátricas, cáncer, autoinmunes, etc.
Sin embargo no se le tiene en cuenta…
Quiero hacer hincapié en el entrenamiento de fuerza, ya que llevo años divulgando sobre los beneficios más allá del componente estético que tiene el entrenamiento de fuerza, pero no es suficiente y hay que seguir.
Si bien es cierto que el entrenamiento de la fuerza ha recibido hasta la fecha cierta atención por los beneficios funcionales a medida que envejecemos, aún sigue habiendo relativamente poca investigación su impacto en la mortalidad, morbilidad y enfermedades metabólicas, aunque cada vez hay más, mostrando la importancia VITAL del entrenamiento de fuerza, aunque aún no se recoja de forma reconocida en las directrices oficiales ni se le de la importancia que tiene incluso en entornos profesionales.
La labor de análisis y divulgación debe ser en mi opinión una prioridad absoluta, ya que a día de hoy NO existe ningún fármaco, medio, modificación de estilo de vida capaz de prevenir y tratar tantas patologías como lo es el ejercicio físico/actividad física (obviamente junto a una alimentación adecuada y un estilo de vida saludable, pero también de forma independiente) y más importante aún, subrayar y conocer los beneficios del entrenamiento de fuerza, puesto que, a nivel social, cuando las personas piensan en el entrenamiento de fuerza instantáneamente piensan en hacer ejercicios complejos y con altas cargas en un gimnasio.